La compañía farmacéutica de Johnson & Johnson, junto com la Asociación Argentina de Psiquiatras (AAP), lanzan en Argentina esta campaña con el fin de desmitificar la depresión y dar visibilidad sobre una enfermedad subdiagnosticada¹ que tiene un impacto alarmante.
De acuerdo con datos de la
Organización Mundial de la Salud, más de 300 millones de personas a nivel mundial padecen de depresión y, aunque existen tratamientos conocidos y efectivos, entre el 76% y el 85% de las personas en los países de ingresos bajos y medianos no reciben tratamiento adecuado para su trastorno.
A partir de la empatía y de ponerse en el lugar de los pacientes y las personas que sufren de depresión, la campaña recurre a situaciones irónicas de la vida cotidiana para mostrar la banalización con la que se interpreta la depresión en la sociedad, con las cuales muchos pacientes se sienten identificados. Frases como
“Vamos, no todo está tan mal. Tomemos un café y verás que se te pasa” o
“¿Por qué no haces un viaje? Eso te va a levantar el ánimo”, buscan minimizar los síntomas de una enfermedad, confundiéndola con un estado de ánimo del que es posible salir conectándose con amigos y/o disfrutando de momentos positivos.
Pero la realidad es otra: la depresión es una enfermedad de origen biológico y necesita ser tratada como tal. Según la
OMS, en América Latina se estima que el 5% de la población tiene depresión y no lo reconoce, incluso para sí mismos.
“Toda aquella persona que sufre depresión tiene una alteración en la funcionalidad de los neurotransmisores y receptores de las neuronas, es decir de la "química cerebral”. Si bien los estados de ánimo son naturales como respuestas a circunstancias internas o externas, existen algunos poco frecuentes que son producto de enfermedades mentales. La sociedad no puede distinguir cuando realmente se trata de una patología mental y en general se tiende a prejuzgar y desvalorizar a dichos pacientes, surgiendo inevitablemente el estigma” comentó el Dr. Ricardo Corral, médico psiquiatra asistencial y Presidente de la AAP.
Los síntomas pueden aparecer juntos o separados y entre ellos se encuentran la falta de concentración; la pérdida de interés o de placer; afecciones físicas como dolores de cabeza, calambres y problemas digestivos; y una constante sensación de tristeza.
Al ser una enfermedad compleja puede ser evadida o mal interpretada como angustia, pereza o irritación ante ciertas circunstancias de la vida, lo que puede en algunos casos incluso llevar al suicidio.
“Si bien el suicidio se da mayormente en personas con depresión, esto es evitable en un alto grado con un diagnóstico precoz y un tratamiento adecuado. En este sentido, es super relevante que los médicos psiquiatras difundamos y comuniquemos sobre esta enfermedad mental, para así lograr mejorar el acceso a las consultas y reducir el sufrimiento de los pacientes”,
agregó el Dr. Corral.
En general, los pacientes que sufren de depresión tienen una respuesta positiva al tratamiento. Sin embargo, 1 de cada 3 personas no responde a los antidepresivos convencionales. A este grupo de personas se les considera resistentes al tratamiento (DRT, por sus siglas en inglés)
Janssen realizó el primer estudio epidemiológico en la región
“Depresión resistente al tratamiento en América Latina” (TRAL) para evaluar la prevalencia y el impacto de la DRT en centros de atención de salud y arrojó un dato interesante: en Latinoamérica, el 29,1% padecen DRT, lo que confirma que la enfermedad es altamente prevalente. Además, se supo que en Argentina el resultado promedio de casos con DRT es de 33,2%, mientras que en Brasil (40%), Colombia (32,1%) y México (20,7%).[2]
“Estos hallazgos revelan que existe una gran necesidad insatisfecha en la región por parte de los pacientes con DRT en cuanto a la atención recibida. Con campañas como esta esperamos echar luz sobre esta situación para optimizar el cuidado y los tratamientos que reciben las personas con depresión”,
indicó la Dra. Paula Barreyro, Directora Médica de Janssen Latinoamérica Sur.
La vida con depresión es difícil, pero la DRT puede ser especialmente brutal. Cuando se ve que un tratamiento tras otro no ayuda, el paciente puede perder la esperanza de sentirse mejor alguna vez, ya que todos sus esfuerzos - incluyendo las visitas al médico, los tratamientos medicinales y las sesiones de terapia- pueden parecer una pérdida de tiempo.
Buscando generar conciencia sobre este impacto en la región y eliminar la visión que se tiene en la sociedad, la Campaña busca recordar a aquellas personas que sufren de depresión que el primer paso es reconocer los síntomas y que es necesaria la consulta con un médico especialista para que este les brinde información sobre el tratamiento adecuado.
Si crees que sufres de depresión o conoces a alguien que podría estar atravesándola, recuerda que
#LaConsultaEsElMejorConsejo; es necesario acudir a un médico especialista para recibir la atención adecuada.
Para más información visita el sitio web laconsultaeselmejorconsejo.com/
¿Qué te pareció esta campaña?