La compañía no quiere quedarse atrás en la carrera por los asistentes de voz y el estallido tanto de la realidad virtual como de la realidad aumentada. El buscador ha concretado una inversión de más 1.100 millones de dólares en un fabricante taiwanés de móviles inteligentes.
Google se hizo con el control de la empresa
HTC como accionista mayoritario para impulsar sus propios conceptos en móviles — su gama de teléfonos Píxel se los fabrican otras empresas—, y en asistentes de voz —aquí quiere competir con el futuro aparato del hogar HomePod de Apple y la gama Echo de Alexa, desarrollada por Amazon—. Con su nueva alianza, Google también espera mejorar la competencia en dos tecnologías al alza: la realidad virtual y la realidad aumentada, un sector en el que la taiwanesa HTC tiene una posición destacada con el sistema Vive. Al hacerse con él, Google tratará de plantar cara al sistema Hololens de Microsoft y al Oculus de Facebook.
HTC, que mantendrá la fabricación de teléfonos también bajo su propia marca, ha firmado un acuerdo de cooperación para desarrollar teléfonos con Google y un acuerdo de uso de sus patentes durante diez años por parte del buscador. Traspasará a su nuevo comprador unos 2.000 empleados, según dijo el director financiero, Peter Shen Daobang.
La presidenta de HTC, Cher Wang, aseguró que esta transacción les "asegura la continuidad en la innovación" en la división de teléfonos inteligentes "y de realidad virtual", gracias a la inyección de fondos, según EFE. La empresa se estaba quedando atrás en la carrera con Samsung y Apple, así como en la dura competencia con fabricantes chinos como BBK, de teléfonos low cost de alta gama.
Una relación de hace años
La relación de Google y HTC viene de lejos. El primer móvil de Google con su sistema operativo Android, llamado Nexus, ya lo fabricó HTC en 2010. Google ha recurrido después a diferenets fabricantes. Pero ahora, comprar la participación mayoritaria de HTC le permite seguir más de cerca las tendencias de mercado e investigar sin tener que derivar la fabricación luego en terceras empresas. Precisamente, el próximo 4 de octubre Google celebrará un evento para desvelar sus nuevos modelos de móviles, el más potente de los Píxel 2 (la gama que sucedió a los Nexus) está fabricado por HTC. Habrá otro modelo secundario que será de LG.
Para los siguientes lanzamientos, Google controlará directamente a un fabricante, y eso le permitirá enfocar sus esfuerzos en investigación, márketing y distribución de una manera más eficiente y dar un impulso al sistema operativo Android. El sistema operativo de los de Mountain View tiene actualmente una cuota superior al 85% del mercado de smartphones pero se posicionan en el mismo rango que Apple en cuanto a percepción de valor.
Ante los rumores y la especulación de una posible compra, la cotización de las acciones HTC quedó suspendida el jueves. La compañía taiwanesa convocó entonces a sus empleados para hacer el anuncio. El movimiento llama la atención porque Google ya intentó tener un fabricante bajo su paraguas, con la compra de Motorola. Entonces, como hará ahora, la empresa mantuvo la marca del fabricante. Pero en el caso de Motorola, tres años después se la vendió a Lenovo.
Se espera que HTC pase a estar bajo la batuta de Google para mantener una línea coherente en cuanto a concepción de marca y productos finales. La realidad aumentada, virtual y enriquecida (un formato híbrido entre ambas) es uno de los campos que Google quiere liderar con la adquisición de HTC.